El reciclaje de componentes electrónicos es obligatorio en Europa desde hace apenas 13 años. Actualmente en España se recogen ya de media 3,5 kilos de residuos de aparatos electrónicos por habitante
al año, aún por debajo del objetivo establecido por ley, que se sitúa en los cuatro kilos por ciudadano.
“A pesar de que nos queda un largo camino para alcanzar las cifras registradas en países más avanzados como Suecia o Noruega, el salto dado en algo más de una década ha sido considerable”, opina José Pérez, consejero delegado de la plataforma medioambiental Recyclia, que gestiona las acciones de Ecopilas, Ecofimática, Ecoasimelec y Tragamóvil, fundaciones dedicadas a la recogida selectiva y el reciclaje de pilas usadas. “En lo que se refiere al compromiso de empresas y usuarios, podemos decir con satisfacción que la sociedad ha asimilado la necesidad de contribuir al cuidado del medio ambiente y al ahorro energético también mediante el reciclaje de este tipo de residuos. Cabe destacar, el esfuerzo de los usuarios para separar los residuos electrónicos y depositarlos en sus contenedores específicos”.
No en vano, y según datos del CIS, más del 60% de los españoles emplea habitualmente los puntos limpios o llama a su ayuntamiento para deshacerse de los electrodomésticos y otros aparatos electrónicos.
Te animaos a leer todo esto y más en el reportaje elaborado por nuestros amigos de TICBEAT en su web: